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Audioslave (Audioslave)

Hemos estado por la mañana en un pequeño concierto de una banda que hacía versiones de éxitos de los años 80 y 90 del rock español. Canciones que nos han devuelto a una parte irrepetible de nuestra vida. Y lo que tiene la melancolía es la virtud de hilar recuerdos bonitos sin descanso. Parecería lógico que hoy os hablara de cualquiera de los grupos y cantantes que han sonado esta mañana, pero al acabar el último aplauso me han venido a la mente los acordes de una canción de un grupo norteamericano. Como os decía, la melancolía hace giros insospechados en nuestra mente.
Audioslave nace a principios de siglo con la fuerza que da unir a uno de los mejores cantantes de rock y tres de los componentes de Rage Against The Machine. En muchos de los artículos que se pueden encontrar en la red nos habla de una superbanda, término que no termino de entender, pues supone hablar de fama más que de calidad.
Pero sin entrar en consideraciones sobre su estatus, es cierto que la banda aportó al panorama musical un buen puñado de canciones que perdurarán durante muchos años. Con solo tres discos en su haber, Audioslave desplegó un rock poderoso, con mensajes políticos y sociales comprometidos y con un sonido único, fruto de cuatro de los mejores músicos de su generación.
En este blog ya os hemos hablado de Chris Cornell, así que poco que añadir sobre una voz poderosa que, por desgracia, se apagó hace unos años.
Pero el sonido de la banda no hubiera sido el mismo sin los acordes y rifts de Tom Morello, el cual está considerado uno de los guitarristas mas influyentes del siglo XXI. Sus solos de guitarra son inconfundibles, mezcla de estilos musicales y técnicas de punteo. Completaban la banda la batería de Brad Wilk y el bajo de Tom Commemford, dos musicos que siempre han estado colaborando con los mejores músicos de su país.
En su primer disco, que llevaba su propio nombre, empezaron a dejar muestras de todo el talento que atesoraban. I’m the Highway, Like a Stone o Cochise forman parte de cualquier discoteca rockera que se precie. Aunque, al principio, el recibimiento de la crítica fue muy frío, el público se volcó con ellos, convirtiedo el trabajo en uno de los mas vendidos del año.
Tuvieron que editar dos discos más para que la crítica musical les concediera el mérito que tenían, pero esa ya es otra historia.
Con solo las tres canciones que he nombrado ya merecerían haber entrado en la lista de grupos imperecederos. El virtuosismo de sus composiciones y sus directos son un espejo donde cualquier grupo de rock debería reflejarse.
Un trabajo que alcanza la hora de música y donde hay sitio para el rock más fuerte, pasando por baladas a flor de piel y rarezas que enriquecen un álbum imprescindible.
Lo dicho, la melancolía me ha traído cosas muy buenas. Espero que las disfruten.