Publicado en Libros, Novela gráfica

V de vendetta (Alan Moore y David Lloyd)

Con la ilusión de saber que el gran Allan Moore estaba al frente del guión, iba devorando las páginas casi sin pestañear. Solo cuando llegué al final descubrí que no había estado cómodo.  Algo fallaba. No podía dejar de pensar sobre qué podía ser. Cuando terminas un libro y te ha gustado, te sientes satisfecho, paladeas frases, capítulos y tramas.  Con V de vendetta sucedió que mi entusiasmo dió paso a la decepción. En una segunda lectura que hice años después descubrí el porqué. No seré yo quien cuestione a los grandes maestros de la novela gráfica. Moore es el creador de algunas de las mejores novelas gráficas para DC cómics. Su aportación como guionista y creador es tan grande que  posiblemente su reconocimiento como mejor escritor de historias, no sea exagerado. 
Sin embargo, aquí nos deja con la sensación de quiso y no pudo ser.
En esa lectura posterior vino rápidamente lo que me impedía disfrutar de esta novela que cuenta con legiones de seguidores.
Mi mayor traba para haberlo disfrutado se encuentra en su parte gráfica . Los dibujos de David Lloyd me resultan estáticos y sin fuerza. No me resultaba creíble la viñeta, su composición del escenario y la coreografía de los protagonistas con relación a unos textos ambiciosos y duros. Tenía el hándicap de la famosa máscara sonriente, que le quita mordiente al recurso de expresar con las facciones del rostro los sentimientos y sensaciones. Pero en el resto de los personajes tampoco podremos sentir el miedo y la violencia de la que son objeto. El color, una mezcla entre sombras borrosas y excesos de oscuridad tampoco ayudan al lector a interiorizar la historia.
Una pena, puesto que su argumento es tremendamente atrayente: la lucha eterna entre la libertad individual y el control de las masas.  Una historia bien hilada, con tintes distópicos, que enfrentaba a un gobierno fascista y un héroe anónimo que lucha por destrozar una forma de vida controlada y servil.
Lástima que el conjunto no sea perfecto, aunque el impacto que tuvo y tiene en nuestra sociedad es muy grande. No olvidemos el movimiento anonymous, que recrea ciertas cosas de esta novela.
Pero, aún con las reticencias, creo que merece una lectura y disfrutar de una historia compleja, ambiciosa y con tintes políticos y filosóficos.