Publicado en Libros, Novela

El anarquista que se llamaba como yo (Pablo Martín Sánchez)

¿Qué harías si un día, al escribir tu nombre en Google, descubrieras que en el siglo XX hubo una persona que se llamaba igual que tú, con el mismo nombre y tus dos apellidos? ¿Y si la única referencia que encontraras fuera que fue un anarquista, capturado y condenado a muerte? Desde luego, si me hubiera ocurrido a mí, mi reacción habría sido la misma que la que tuvo Pablo Martín: seguir investigando para conocer más de su historia.

Lo que descubrió, tras una difícil investigación llena de callejones sin salida, mereció la pena. Y es que su tocayo había tenido una vida digna de ser novelada. Como si fuera fruto del destino, este libro aúna lo mejor de los dos Pablos: la historia épica que vivió el Pablo anarquista y el buen oficio del Pablo escritor. Porque la verdad es que este hombre escribe como los ángeles.

El personaje de Pablo es, desde luego, lo mejor del libro. Adoro a ese pequeño que no lloró al nacer y que no dijo una palabra hasta que nació su hermana y entonces, al mirarla, dijo «guapa» (no está mal como primera palabra); al niño que correteó una mañana por las calles de Madrid y se encontró de frente con la magia del cinematógrafo; al adolescente que recorrió a lomos de un burro la España profunda de principios de siglo; al joven enamorado, que es capaz de lo que sea por encontrar a su amada desaparecida; al soñador que no sabe decir que no a su destino; y, sobre todas las cosas, adoro al vampiro que murió dos veces o tal vez ninguna.

Pablo es lo mejor, sin duda, pero no es el único aliciente del libro. Porque a su lado conocemos de cerca la España de principios del siglo XX: la pobreza del país durante el reinado de Alfonso XIII, los movimientos anarquistas que intentaron terminar con su vida, la semana trágica de Barcelona y el golpe de estado de Primo de Rivera.

Viviremos este periodo desde la vida de un joven periodista que coquetea con el movimiento anarquista, más por las relaciones personales que mantiene que por fuertes convicciones políticas. Saldremos exiliados con él a Francia, donde nos encontraremos con la intelectualidad española más interesante. Oiremos hablar del movimiento anarquista argentino, conoceremos grupos naturalistas que conciben la existencia de otro modo y seremos testigos de uno de los peores intentos de rebelión jamás llevados a cabo.

Tengo que confesar que yo no suelo releer los libros que me gustan, pero este es una excepción. Lo he leído de principio a fin 3 veces y vuelvo de vez en cuando a releer pasajes. No me canso de él.